Hace poco me escribió al correo alguien que me hizo una pregunta. Llamémoslo, para variar, Juan. Juan escribió, resumiendo, esto: “Soy de baja estatura (1.65 m). Cada vez que voy a algún lado me siento mal si estoy al lado de gente que mide más de 1.80 m. He llegado a un punto en el que me he vuelto introvertido y he comenzado a evitar las salidas con amigos. Obviamente esto ha impactado en mi vida sentimental porque ya no soy el hombre divertido y conversador que solía ser. ¿Qué puedo hacer?”
Date un minuto y piensa qué harías en el lugar de Juan.
Hombre, puede que te veas pequeño si tu grupo de amigos son los jugadores de la NBA, pero 1.65 m es una estatura perfectamente normal. ¿Pero si fueras más bajo, a quién le importaría? a casi nadie, excepto a ti. Por qué la estatura no importa.
Mira a tu alrededor. Ah, ¿hay un tipo de 1.80 m bloqueándote la vista? deja de lloriquear por eso y avanza uno o dos pasos hasta que lo sobrepases. Ya. ¿Te ubicas? hay tipos más altos que tú y más bajos que tú, más flacos y más gordos. Y claro, hay tipos que son naturalmente modelos. El resto es definido por cómo se llevan consigo mismos: son seguros o no lo son. ESO es lo que la mayoría de mujeres notan.
Entonces está claro: puede que las mujeres de 1.80 piensen que eres muy bajo para ellas (e incluso eso es relativo, porque hay varias a las que no les importaría). De cualquier manera, eso no es un limitante. Debes aceptarte como eres. Estate orgulloso de lo que puedes ofrecer a los demás, porque en este mismo momento tu estatura no es obstáculo para hacer cualquier cosa que quieras llevar a cabo.
El único que se está poniendo trabas a sí mismo eres tú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario